Consideramos que debe de primar sobre todo el aspecto lúdico, favoreciendo la afectividad en un clima de seguridad y confianza, donde los/las niños/as puedan jugar, relacionarse, descubrir, experimentar, manipular, observar, expresarse, tener sus ritmos de aprendizaje y diversión, siempre ayudados y reforzados positivamente por todos los adultos de la Escuela.

En Peluche creemos que el mundo afectivo del niño/a es el motor de su desarrollo emocional, social e intelectual, por lo que todas sus vivencias, experiencias y situaciones personales, son educativas y deben ser incorporadas al aula como objeto de nuestra atención y trabajo pedagógico.

Uno de los fundamentos educativos de nuestro Centro, es la cooperación con padres y madres para contribuir, de forma positiva al proceso educativo de los niños y niñas. El intercambio de información sobre los/las niños/as es primordial para poder comprenderlos/as mejor y afianzar la confianza mutua entre padres y madres con educadoras.